5 distintas maneras de ser mamá y por qué todas son acertadas
¿Cuál de estas mamás eres?
Mamá control freak
Es la mamá que todo lo controla, incluso si no está con sus hijos siente una gran inquietud por controlar lo que puedan estar haciendo sus pequeños. Horarios, idas y venidas, comidas, rutinas, juegos, en fin, TO-DO. A veces puede ser que se exceda un poco pero otras veces hace tanta falta alguien que conozca tan bien a sus hijos como para apoyarlos a mantener la estabilidad en sus vidas.
Si esta mamá usa su súper poder para mantener todo en orden pero desde una forma amorosa, considerándose a ella y validando las emociones de sus pequeños, al final del día su esfuerzo será apreciado por toda la familia.
¡Gracias, mamá, porque siempre sabes dónde está la otra media del par que misteriosamente desaparece cuando me las quito!
Mamá trabajadora
Es la mamá que se propone metas profesionales y hace todo lo posible por alcanzarlas. Luego de la cena, estudia. Se levanta temprano para arreglar loncheras y llegar puntual a la reunión en la oficina. Aprovecha al máximo su tiempo en la oficina. Nada la detiene.
Cuando la mamá trabajadora está plena con su realización personal y profesional y logra llevar una vida balanceada entre el trabajo y la familia, entonces se siente bien con ella misma y con sus seres queridos, se muestra disponible y sin duda tiene mucho que enseñarle a sus pequeños.
¡Gracias, mamá, por darme el mejor ejemplo del mundo!
Mamá en casa
Aunque no sale a hacer labores de oficina, esta mamá trabaja 24/07 en casa: prepara desayunos, almuerzos y cenas; se esmera por hornear deliciosos postres; mantiene la casa limpia y muchas veces hasta deja la ropa blanca tan impecable que parece nueva. Además acompaña a sus hijos a hacer tareas, los lleva y los busca en sus múltiples actividades extra escolares y, por supuesto, siempre los arropa en casa y les da su besito de buenas noches.
¡Gracias, mamá, por tu compañía y dedicación!
Mamá mejor amiga
Cuando mamá juega con sus hijos todo el tiempo, ve todas las películas con ellos, les da las meriendas más dulces y chocolatosas y los consiente en cada petición. Para algunos es una mamá que pareciera poner pocos límites y para otros ella vive intensamente el día a día con sus hijos.
En todo caso es una mamá que desde el amor quiere aprovechar cada instante de la infancia de sus pequeños porque sabe que esta etapa dura muy poco en la vida.
¡Gracias, mamá, por jugar conmigo cuando te lo pido!
Mamá que disfruta la maternidad con sus altos y sus bajos
Esta es la mamá que incluye todas las anteriores. Es la mamá que vemos en los parques, que llora de vez en cuando en los pocos momentos de soledad que tiene en casa, que busca un espacio para salir con sus amigas, que ama infinitamente a su familia. Es una mamá que está consciente de cuándo un momento la desespera y bueno, a veces no está tan consciente y se desespera, pero luego sabe pedir disculpas y desde el amor se reconoce como un ser humano. Es una mamá que sabe que la maternidad es un gran desafío, que está llena de momentos alegres pero que también sabe que una mamá conoce de cerca el dolor que puede producir ver a su pequeño llorar cuando se cae luego de correr o la tristeza que le produce la frustración de su hijo. Es una mamá siempre, no importa dónde esté o lo que esté haciendo, es mamá incluso cuando sus hijos no están con ella. Es la mamá que a veces controla, a veces trabaja, a veces está en casa y a veces es la mejor amiga, es la mamá que incluye todas las anteriores, porque, finalmente, sabe que ser mamá es un oficio de por vida pero al mismo tiempo puede ser la meta más grande, el más bello sueño, la actividad más significativa de la vida.
¡Gracias, mamá, porque con tu entrega, tu ejemplo, tu presencia y tu amor me inspiras cada día!