5 Errores frecuentes que los padres cometen en la crianza de sus hijos

Muchos papás y mamás se preguntan con frecuencia ¿lo estaré haciendo bien? Y la verdad es que para la tarea de educar a los pequeños no hay manual de instrucciones pero sí hay instinto. Aquí te compartimos estos 5 errores frecuentes que los padres cometen en la crianza de sus hijos.

Lo primero que es bueno recordar es que nadie es perfecto, así que una buena idea es que los padres encuentren un grupo de apoyo en el que puedan compartir sus experiencias con otros padres, cómo viven la crianza, cuáles son las áreas de oportunidades que ven, cuáles son sus miedos e inseguridades y cuáles son las estrategias que ponen en práctica para salirle al paso a las situaciones difíciles.    

Mira estos 5 errores y unas buenas ideas para superarlos

Mama y papa tambien se equivocan. Consejos para padres de Juana la Iguana. Consejos para crianza

1

Creer que equivocarse está mal

Lo importante es recordar que vivir con consciencia la crianza te abre una ventana hacia el crecimiento personal. Cuando mamá y papá trabajan en su mejor versión, también sus hijos se sienten en confianza para aprender y ser mejores cada día en lo que sea que se propongan.

Oportunidad: cuando los padres cometen un error frente a sus pequeños pueden aprovechar de mostrar la importancia de reconocer los errores propios, pedir disculpas y aprender a encontrar la calma.

2

Pararse en los extremos: muy rígidos o muy flexibles

La armonía en casa solo es posible cuando todos se escuchan y se legitiman entre sí, cuando aprendemos a tratarnos desde el respeto y con límites claros que nos ayudan a entender cuál es el espacio de los otros. Antes de asumir una postura, puedes preguntarte ¿cómo me sentiría yo si me hablaran así / me hicieran esto / me pasara esto? Y si te genera incomodidad la respuesta entonces tal vez a tus pequeños tampoco les va a caer muy bien.

Oportunidad: busca un espacio para tener conversaciones que los ayuden a encontrar el equilibrio en familia. Cuando llegan a acuerdos entre todos, los niños se sienten escuchados y motivados a cumplir con las normas porque no las asumen como una imposición.

3

No mostrar las emociones

Cuando papá y mamá son conscientes de sus emociones, las viven y entonces pueden hacerse cargo de ellas en búsqueda de su propia auto-regulación. Desde esta mirada, al mostrar sus emociones, mamá y papá transmiten un gran mensaje a sus chiquitos: es saludable hacer visible lo que sentimos.

Oportunidad: es bueno que los padres demuestren sus emociones y conversen sobre ellas en familia. Hazle saber a tus hijos lo mucho que los amas con besos y abrazos y muéstrales cómo, desde tu experiencia, superas el miedo, la rabia o la frustración.

4

Olvidar las capacidades de los niños

Muchas veces desconfiamos de los niños, algunas personas piensan que porque son pequeños simplemente no pueden hacer las cosas por sí mismos y ciertamente los niños tienen diferentes capacidades de acuerdo a sus edades y está bien considerar esto para evitar que se frustren, pero también es bueno que papá y mamá dejen que sus hijos colaboren en algunas tareas del hogar o que cumplan con pequeñas responsabilidades propias de sus rutinas como guardar los juguetes; de esta forma van adquiriendo habilidades, se hacen más responsables y se incrementa su autoestima y autoconfianza.

Oportunidad: desde la visión de la parentalidad positiva frente a la sobre protección los padres pueden optar por confiar más en sus hijos y sus habilidades. Además de establecer límites de forma amorosa con la finalidad de promover en los chiquitos el respeto por ellos mismos y por los otros.

5

Creer que todos los niños son iguales

Pues no, ningún niño se parece a otro, ni siquiera los hermanos. Así que cuando los comparas o intentas que hagan las cosas como otros niños, pudieras estar afectando su autoestima o generándoles expectativas que difícilmente van a cumplir.

Oportunidad: aprovecha cada instante para conocerlos, escucharlos y legitimarlos, en la crianza se aprende cada día algo nuevo de ti y de tus hijos.

¡Sigamos aprendiendo juntos!

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Desde tu experiencia ¿cuáles otros errores y oportunidades ves?